jueves, 3 de diciembre de 2015

Pequeños pasos, grandes logros

Ya llevamos 7 meses de aventuras, los últimos meses no nos ha quedado mucho tiempo libre para escribir, pero hemos aprendido muchas cosas, increíblemente más de las que esperaba.

Mi bebito ya esta dejando de ser un bebito, cada día se vuelve más independiente, creo que quiere saltarse el gateo y comenzar a caminar, de repente se para apoyado en la mesa, en los brazos del sillón, o en nuestros brazos, la expresión de felicidad que hace cuando le damos los brazos y puede impulsarse para ponerse de pie es increíble, aparentemente le gusta la sensación de libertad y la mayor facilidad para movilizarse.

Es increíble ver lo rápido que se desarrolla cada día, como aprende cada movimiento y lo repite una y otra vez hasta que se vuelve mas fácil; la semana pasada le tomo dos días saber que podía mantenerse de pie cuando se agarra de los bordes del corralito, 

Como padres lo único que hemos intentado hacer es mantenerlo estimulado, no hacerle todo sino esperar a ver como reacciona o que es lo que quiere lograr o alcanzar, si toma impulso para llegar a un lugar primero lo dejamos hasta donde pueda. No voy a decir que no lo cargamos, él disfruta estar en brazos, pero yo también disfruto cargarlo y sentir que me necesita, pero aunque a veces sentimos que es muy rápido tratamos de impulsarlo y no detenerlo en sus intentos, creo que eso le ha hecho sentir confianza en realizar cosas para las que consideramos esta muy chiquitito, pero es lindo verlo conseguir esos pequeños logros.

Aparentemente, en corto tiempo pasaremos del dolor de brazos por cargar las 20 libras de peso al dolor de espalda por vigilar sus pequeños pasos y, una vez allí, no podremos detenerlo. Comenzará a caminar por donde su instinto lo lleve, será un primer gran logro, pero mi corazón sabe que es el primer lazo que le suelto y que nunca más dependerá de mi y mis brazos para caminar su camino.